Cómo comportarse con los clientes como Escort
¡Hola chicas! Gracias por leer este blog.
Cuando empiezas a trabajar como escort, es habitual que te sientas insegura sobre cómo comportarte con los clientes. Puede haber muchas preguntas y mucho que considerar. Una pregunta habitual es si puedes rechazar a un cliente. La respuesta es sí: si no quieres ir a una cita, no tienes por qué hacerlo. Pero recuerda, si rechazas a un cliente, sé educado y explícale por qué. Al igual que cuando te niegan la entrada a un club debido a un control facial, puede resultar incómodo. Intenta manejar estas situaciones con calma y tacto. Nunca expreses enfado o frustración. Discúlpate siempre si tienes que echar a un cliente.
Evita ser grosero o hacer comentarios negativos sobre el aspecto del cliente. Por ejemplo, decirle que huele mal o que tiene un aspecto determinado podría ofenderle fácilmente. Los clientes pueden dejar rápidamente una mala crítica, lo que puede afectar a tu reputación. Trata a todos los clientes con amabilidad, independientemente de su aspecto o situación.
Piensa en ello como si fuera la diferencia entre alojarse en un albergue económico y en un lujoso hotel de 5 estrellas. El servicio y la experiencia son lo que realmente los diferencia. Cuando un cliente decide pagar tarifas más altas, está buscando algo especial, algo más allá de lo básico. No buscan sólo un encuentro rápido, sino una experiencia completa que les parezca exclusiva.
Los clientes que pagan entre 400 y 800 dólares por hora esperan recibir un servicio de primer nivel. Nunca actúes como si les estuvieras haciendo un favor por estar con ellos. Respeta a tus clientes y procura ofrecerles siempre la mejor experiencia. Recuerda que hay mucha competencia en este sector, y quieres destacar como el que ofrece un servicio excepcional.
No basta con ser una chica guapa. También debes saber comunicarte con tus clientes y hacer que se sientan cómodos. Establecer una conexión es esencial. Muchos clientes se sienten solos o estresados por su trabajo, y buscan compañía y una amiga con quien hablar. Si quieres que vuelvan a ti, céntrate en comprender sus necesidades y proporcionarles una experiencia agradable.
Pongamos un ejemplo: Una chica tuvo ocho clientes en un día, pero sólo dos se quedaron a la sesión, mientras que el resto se marchó. La chica era atractiva, pero su actitud despreocupada y su falta de profesionalidad provocaron una mala experiencia. No iba vestida adecuadamente y su comportamiento no respondía a las expectativas de una escort de alto nivel. Los clientes buscan algo más que el atractivo físico; quieren a alguien capaz de crear una experiencia agradable y memorable.
Tu objetivo es hacer que el cliente se sienta especial. Salúdale con una sonrisa, pregúntale cómo está y escucha de qué quiere hablar. Deja que dirijan la conversación mientras tú te mantienes atento y amable. Cuando los clientes se sienten cómodos y apreciados, es más probable que prolonguen el tiempo que pasan contigo, lo que significa más dinero para ti con menos esfuerzo.
Cobra siempre por adelantado. Nunca permitas que un cliente se vaya sin pagar, ya que puede dar lugar a situaciones incómodas. Algunos clientes pueden intentar evitar pagar, alegando que no tienen dinero en efectivo, por lo que es esencial cobrar antes de empezar cualquier servicio. Esto garantiza que ambas partes tengan claras las expectativas.
Evita quejarte de tu vida personal o expresar pesimismo. Los clientes buscan una experiencia positiva y acogedora, no a alguien que descargue sus problemas. Intenta mantener siempre una actitud positiva y muestra interés por el cliente, haciéndole sentir que es la persona más importante de la sala.
Un pequeño detalle como ajustar la iluminación de la habitación puede marcar una gran diferencia. Si es de día, intenta crear un ambiente más íntimo atenuando las luces. Ofrece a tu cliente algo de beber, como té, café o agua, y entabla una conversación amistosa mientras lo disfruta.
En última instancia, la clave del éxito en esta línea de trabajo es cómo tratas a tus clientes. Muéstrales respeto, amabilidad y un interés genuino en que se sientan valorados. Construye relaciones con tus clientes habituales, y ellos te recompensarán con lealtad y buenos ingresos.
Tanto si trabajas por tu cuenta como con una agencia, recuerda que tu actitud y tu comportamiento determinarán tu éxito. Esfuérzate siempre por ser profesional, amable y atento, y atraerás a los clientes adecuados que te aprecian por lo que eres.
¡Te deseo lo mejor!